Editorial: ¡Bienvenidos a la fábrica del futuro!

Cada vez existe mayor consenso en señalar el actual momento como la antesala de una nueva revolución industrial. Por orden, nos encontraríamos a las puertas de la cuarta revolución industrial. Si la máquina de vapor dio pie a la primera; la electricidad, a la segunda, y la automatización, a la tercera; la hiperconexión mediante tecnologías digitales entre las personas y de estas con las máquinas, así como los cambios en los hábitos de consumo y la amplitud de las fuentes de información están dando lugar a las llamadas «fábricas del futuro». No es coincidencia que el primer Congreso Nacional de Calzado, que organizará el instituto tecnológico Inescop el próximo 7 de octubre en Elda (Alicante), lleve este título («La fábrica del futuro»).

Stand de una firma de calzado en Momad Shoes, septiembre 2016

¿Pero a qué nos referimos y cómo afecta a la producción de calzado? Básicamente la fábrica del futuro es un espacio donde las tecnologías de automatización conectadas y colaborativas facilitan una producción más flexible, posibilitan la personalización de productos, con una fabricación próxima al mercado y con tiempos de entrega más cortos. La incorporación del sector del calzado a esta revolución 4.0 viene ligada a la modernización de sus procesos productivos, de manera que permita a las firmas zapateras introducir series más cortas a demanda del cliente, con mayor rotación de modelos, al mismo tiempo que se mejora la productividad y se ahorran costes. La adaptación de las fábricas españolas de calzado a estos nuevos modos de producción ya estaba contemplada en el plan estratégico 2016/2017 que presentó a principios de año la Federación de Industrias del Calzado Español (FICE). En él se animaba a las firmas españolas a abrazar la cultura lean management (optimización de recursos, eliminación de defectos en origen, renuncia a todo aquello que no genere valor añadido, flexibilidad, mejora del tiempo de respuesta, etc.). Según cálculos de la patronal FICE, la implantación de este sistema lean podría ayudar a reducir costes a las empresas en torno a un 20 o 30 por ciento.

En los últimos años nuestras empresas han incorporado las nuevas tecnologías en las fases de diseño, prototipado y producción asistidas por ordenador

No cabe duda de que nuestro sector ya ha dado los primeros pasos encaminados en esta dirección. En los últimos años nuestras empresas han incorporado las nuevas tecnologías en las fases de diseño, prototipado y producción asistidas por ordenador; de la misma manera que no es infrecuente ver en las compañías asentadas en nuestro país almacenes completamente robotizados, así como el uso de nuevas tecnologías para la fabricación personalizada y a la carta de calzado.

Nuestra industria tiene que tomar conciencia de que atravesamos un momento crucial y que no se trata de una simple moda caprichosa.

Bajo el umbral de esta nueva etapa, que en un principio se desarrollará en un ecosistema industrial pero que a la larga trastocará la misma manera de entender nuestro entorno y relacionarnos con él, el sector nacional del calzado no puede permanecer impasible viendo cómo se le escapa la oportunidad de adaptarse a los nuevos tiempos. Nuestra industria tiene que tomar conciencia de que atravesamos un momento crucial y que no se trata de una simple moda caprichosa. No es así. Los modos y maneras de fabricar zapatos están cambiando en todo el mundo y las empresas que no los incorporen en poco tiempo quedarán obsoletas y estarán condenadas a desaparecer del mercado. ¡Bienvenidos a la fábrica del futuro!

Editorial Revista del Calzado Número 206