Nine West, otra víctima del Retailmageddon
La crisis del comercio minorista que golpeó el mercado estadounidense en 2017 no ha cesado en 2018. Forbes lo ha denominado Retailmageddon, el apocalipsis de la tienda minorista. La última víctima ha sido la firma Nine West, que, tras declarar un concurso de acreedores, ha puesto a la venta sus marcas de calzado para conseguir liquidez. La marca de tiendas de moda se une a una larga lista de cierres de grandes cadenas de distribución este año, como Toys R Us, The Walking Company, Bon Ton y Claire.
La historia se ha repetido con Nine West: disminución de las ventas, una deuda excesiva propiedad de grupos de capital privado y una bajada en las ventas del sector. Desde el grupo han explicado que, aunque Nine West generó unos ingresos de 1.600 millones de dólares, tuvo que hacer frente a una deuda por la misma cantidad. En 2014, el fondo de inversión Sycamore compró Jonas Group, el hasta entonces propietario de la marca, valorando la firma en 2.200 millones. Sycomore vendió entonces dos de sus marcas: Stuart Weitzman y KurtGeiger.
La compañía ha anunciado que ha comenzado las negociaciones con Authentic Brands Group para vender Nine West y Bandolino. Este grupo ya posee las marcas Neil Lane, Frye, Aeropostale y Juicy Couture.
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