Las industrias TCLF exigen a la UE nuevas inversiones en formación

La crisis generada por la covid-19 ha puesto en riesgo miles de puestos de trabajo en toda Europa. Los sectores relacionados con la venta minorista han sido los más afectados debido a las medidas de confinamiento y a la caída en picado del consumo. Si bien se desconoce el alcance final de esta crisis, lo que es seguro es que ha agudizado los problemas que se venían arrastrando y ha acelerado la necesidad de cambios. Para ayudar a resistir la crisis y a llevar a cabo una adaptación adecuada al nuevo contexto, la Comisión Europea está preparando para 2021 una estrategia específica para los sectores TCLF (siglas que engloban las industrias del textil, las prendas de ropas, el calzado y el cuero) dentro del Plan de Acción de Economía Circular de la UE, una estrategia para fomentar la transformación digital, crear empleo y generar nuevos modelos de negocio.

Según Alberto Paccanelli, presidente de la Confederación Europea de la Industria Textil y de la Confección (Euratex), «unos empleados altamente cualificados son la base de la creación de valor en nuestra industria, la razón por la que las industrias del textil y de la moda de la UE son líderes mundiales». Para mantener este valor añadido, Paccanelli solicita el apoyo a las instituciones europeas: «son tiempos de crisis económica sin precedentes y al mismo tiempo de transformación verde y digital: nuestras empresas, especialmente las pymes, necesitan ayuda para mantener puestos de trabajo y crear otros nuevos». En este sentido Luís Onofre, presidente de la Confederación Europea de la Industria del Calzado (CEC), señala la necesidad de este tipo de estrategias. «Nuestros sectores han demostrado los resultados positivos de trabajar juntos en políticas e implementación de competencias. El lanzamiento de un pacto por la formación será la extensión lógica de estos esfuerzos», opina Onofre. Por su parte, Andreas Kindermann, presidente de la Confederación de Asociaciones Nacionales de Curtidores de la Comunidad Europea (Cotance), afirma que «los materiales, procesos sostenibles y las empresas altamente digitalizadas son el futuro de las industrias TCLF», además hace un llamamiento «a los responsables políticos europeos, nacionales y regionales para que faciliten esta transición de habilidades con políticas inteligentes y programas de apoyo».

Entre las distintas medidas propuestas por las patronales europeas TCLF destacan la puesta en marcha de programas de aprendizaje; la transferencia de conocimiento generacional, como esquemas de entrenamiento y tutoría que permitan a los empleados con experiencia/jubilados transmitir sus conocimientos técnicos a la siguiente generación; el desarrollo de centros de excelencia vocacional; la implementación de programas de movilidad y colaboración digital entre estudiantes de Formación Profesional, la educación superior y la industria, incluidas las empresas emergentes; nuevos enfoques sectoriales para el desarrollo de habilidades de inteligencia, y programas de promoción para fomentar el atractivo de carreras profesionales en las industrias de TCLF.