La producción y las exportaciones de la industria italiana del calzado se desploman
El sector italiano del calzado experimentó durante los primeros nueve meses del pasado año una caída tanto de las exportaciones (-9,2 %) como en la producción industrial (-18,9 %) y en el volumen de negocio (-9,7 %). Según los últimos datos que maneja la patronal italiana Assocalzaturifici, una vez concluido el efecto del rebote poscovid y tras un 2023 de práctica estabilidad (al menos en valor), 2024 cerrará con signos negativos en todos los principales indicadores económicos e industriales. Según las previsiones de Assocalzaturifici, la facturación de la industria italiana del calzado caerá en 2024 un -9,3 %, hasta tocar los 13 200 millones de euros (casi 1400 millones menos que en 2023), algo que sin lugar a dudas repercutirá en la estructura industrial y laboral del sector.
Para Giovanna Ceolini, presidenta de Assocalzaturifici, «en el tercer trimestre de 2024 no se ha invertido la tendencia de la situación económica del sector, de hecho más del 60 % de las empresas cerraron con una facturación inferior a los niveles alcanzados en el mismo periodo de 2023, con reducciones superiores al -20 % para una de cada cinco. Los datos acumulados de los primeros nueve meses confirman, por tanto, las dificultades que ya surgieron en la primera parte del año. Los efectos más significativos se produjeron en el comercio exterior. «La tendencia negativa de muchas economías internacionales importantes, en Europa y fuera de las fronteras de la UE, y un contexto geopolítico nada favorable, ha visto añadirse, además del conflicto ruso-ucraniano, otro frente de inestabilidad en Oriente Medio, Las exportaciones de calzado se verán fuertemente penalizadas en 2024. Si en la Unión Europea las ventas muestran caídas bastante limitadas (-2,6 % en valor global, con -2 % en Francia y -6,2 % en Alemania), en los mercados extracomunitarios la caída es del -15,3 %. Estos resultados, sin duda, también se vieron afectados por la desaceleración sufrida por muchas marcas de lujo, cuyo desarrollo había contribuido en los últimos años a sostener la dinámica del sector», explica Ceolini.
Exportaciones
En particular, el informe destaca cómo, en referencia a la demanda exterior, la tendencia es desfavorable para todos los sectores de productos, con la única excepción del calzado con parte superior de caucho, cuyas exportaciones crecieron un +8,2 % en volumen y un +1,3 % en valor. El calzado con parte superior de cuero, que siempre ha sido característico de la producción italiana y que supone el 65 % de las ventas exteriores en valor, registró, en cambio, contracciones del -7,1 % en cantidad y del -8,2 % en valor. Al examinar con detalle cada mercado, los socios de la UE presentan, en general, dinámicas menos negativas que las relativas a los países no pertenecientes a la UE. Entre estos últimos, dan muestras de señales positivas solo en China (+1,7 % en valor, con +19 % en cantidades), Hong Kong (+8,7 %) y sobre todo los Emiratos Árabes Unidos (+26,3 %) y Turquía (con incrementos superiores al +10 % tanto en volumen como en valor). Entre los países que mostraron una dinámica más negativa, destaca Suiza (-51,3 % en valor y -35,4 % en cantidad), seguramente debido a un cambio en las intermediación de los flujos del comercio de los zapatos de lujo.
Tejido empresarial
Por último, la fase económica desfavorable por la que atravesó durante los primero nueve meses del año el sector italiano del calzado se tradujo en saldos negativos, en comparación con finales de 2023, en las cifras relativas a los cierres de empresas (-144 fábricas de calzado activas, equivalente a -4 %) y del empleo (que muestran una disminución de -2619 empleados, equivalente a un -3,6 %).
Categoría: Actualidad