Chiruca se convierte en una compañía carbon free
La reducción de las emisiones de dióxido de carbono (CO2), responsable del calentamiento global y el aumento de la temperatura del planeta, se ha convertido en uno de los principales desafíos para la comunidad internacional. Por ese motivo, en Calzados FAL-Chiruca han asumido el compromiso de ser una empresa carbon free, compensando el 100 % de sus emisiones de CO2, en cada etapa de producción.
Con este propósito se lanzó el proyecto «Absorción Bosque Chiruca», una plantación de veintitrés hectáreas en terrenos propios donde se han sembrado más de 24 000 árboles que contribuyen a una absorción significativa de CO2.
Este espíritu innovador en sus políticas sostenibles ha permitido que, desde 2012, sean pioneros en la certificación de la Huella de Carbono CO2 controlado por Aenor. Además, cuentan con un sistema de gestión medioambiental certificado según la norma UNE EN ISO 14001, lo que les permite establecer metas claras y programas de mejora ambiental.
Carbon free
Para llegar a ser una compañía de calzado carbon free, se debe compensar el 100 % de emisiones de gases efecto invernadero que se emiten a la atmósfera en la producción de zapatos. Para ello, se calculan las toneladas de CO2 que se emiten cada año en las siguientes acciones implicadas en la fabricación de calzado: transporte materias primas recibidas, fabricación completa del calzado, promoción de producto (viajes comerciales, etcétera), transporte de envío de mercancía, itinerancia de empleados y consumo de energía e instalaciones.
Tras el cálculo, se entra en la fase de compensación. En este sentido, el Bosque Chiruca, situado en la población de Bergasa (La Rioja), absorbe el CO2 de la atmosfera.
Asimismo, Calzados FAL-Chiruca verifica su huella de carbono a través de Aenor bajo el GHG Protocol «Huella de Carbono CO2 calculado». Además, verifica el cálculo, reducción y compensación de huella de carbono a través del Ministerio de Transición Ecológica del Gobierno de España, siendo la primera empresa en haberlo conseguido. Por otro lado, con la instalación de placas solares en instalaciones propias genera energía limpia y con energías renovables adquiere el resto de energía eléctrica necesaria.
«Chiruca cree firmemente que la responsabilidad ambiental no solo beneficia al planeta, sino también a sus clientes. Juntos, pueden construir un futuro más sostenible. Porque en Chiruca saben que cada paso cuenta, tanto en la montaña como en el cuidado de nuestro planeta», aseguran desde la compañía riojana.
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