La industria del calzado en Alemania se muestra pesimista de cara al futuro

La industria del calzado de Alemania acusa de manera pronunciada la recesión económica que atraviesa el país. Con una inflación difícil de contener y una crisis energética provocada por la invasión rusa en Ucrania, el consumidor germano no termina de confiar en la recuperación de la economía y contiene cada vez más sus compras de calzado.

En este sentido, según cifras de la patronal alemana de empresas de calzado y artículos de cuero (HDS/L), durante el primer semestre de 2024 la industria alemana del calzado alcanzó unas ventas totales de aproximadamente 1150 millones de euros. En el mismo periodo de 2023, las ventas totales de de calzado fueron en torno a 1170 millones de euros, lo que supone un ligero retroceso del 1,7 %.

Exportaciones e importaciones
En el primer semestre de 2024, el valor total de las exportaciones de calzado ascendió a 5200 millones de euros. En comparación con el mismo periodo del año anterior, esto supone un aumento del 2 % por ciento. Los mercados más importantes para el calzado alemán dentro de Europa son Polonia y Francia. En cuanto a las importaciones de zapatos por parte de Alemania durante la primera mitad del año, estas alcanzaron un valor de 5800 millones de euros (-7,5 %). Los principales proveedores de calzado de Alemania son Italia, China, Vietnam e India. En este sentido, solo Vietnam arrojo porcentajes positivos de ventas en Alemania, un +8 %, mientras que tanto las italianas (-20 %), las chinas (-15,8 %) como las indias (-2,5 %) descendieron.

Empresas y empleo
En cuanto al empleo y al tejido empresarial de la industria alemana del calzado, en junio del presente año trabajaban en la industria alemana del calzado unas 15 700 personas. El sueldo medio de trabajador del sector era de 26 870 euros (+8,1 %).

Perspectivas
Según la HDS/L, la industria del calzado en Alemania se enfrentará a grandes retos en los próximos meses. «Las inversiones en digitalización y sostenibilidad deben abordarse a pesar de la débil motivación de los consumidores. La industria del calzado espera los impulsos adecuados de los legisladores: leyes que liberen los puntos fuertes de la economía, estimulándola, sobre todo en lo que respecta a las pequeñas y medianas empresas; y también, por último, como se ha anunciado a menudo, que reduzcan la burocracia en lugar de aumentarla», explican los responsables de la patronal del calzado alemán.

«También pedimos especialmente a los gobiernos de Bruselas y Berlín que garanticen unas condiciones de competencia justas. Esto se aplica a las plataformas de venta online de Temu y Shein. Estas se introducen en el mercado desde el exterior, la mayoría de las veces de forma libre de impuestos, y no tienen por qué temer la supervisión del cumplimiento de las normas de sostenibilidad. Esto va en detrimento del comercio y de los fabricantes alemanes y europeos. Podemos imaginarnos el impacto medioambiental de un único paquete que contiene un par de zapatos baratos enviados directamente», añaden desde HDS/L.

De cualquier modo, la patronal alemana no prevé que la situación del sector mejore en la segunda mitad del año ni que se restablezca la confianza del consumidor europeo. Según las encuestas que maneja la HDS/L, muchas empresas teutonas esperan una caída significativa de la producción en los próximos meses. «El sector no ve muchas señales de recuperación en el segundo semestre de 2024. Incluso se puede esperar que, debido a las numerosas cargas burocráticas adicionales, el calzado sea significativamente más caro el próximo año», explican los representantes de los empresarios alemanes.