Avecal organiza un webinar sobre higienización en tiendas y fábricas de calzado
La Asociación Valenciana de Empresarios del Calzado (Avecal), en colaboración con Desinope 323 y la Federación de Industriales del Calzado de la Comunidad Valenciana (Ficcval), organizó el pasado 26 de agosto un webinar sobre las medidas de higienización que las empresas del calzado pueden aplicar en entornos de fabricación y comercialización para combatir y detectar la presencia del nuevo coronavirus. Esta iniciativa se enmarca dentro del proyecto Innocal que está apoyado por la Conselleria de Economía Sostenible.
El encuentro online comenzó con una primera ponencia sobre el uso del ozono en espacios como elemento de desinfección e higienización. El director de Esaltia, Miguel Escortell, incidió en que «el ozono es un desinfectante químico con una elevada capacidad oxidativa» que le permite eliminar a las bacterias e inactiva los virus, quistes, hongoso, toxinas, algas y protozoos. Para Escortell las ventajas fundamentales del uso de esta sustancia como medida de higienización son que dispone de una gran versatilidad, una importante potencia oxidante y es fácil de producirla. Además, el director de Esaltia recomendó trabajar en la higienización o sanitización de toda la cadena de procesos del calzado, incidiendo especialmente en las zonas de almacenamiento de materias primas y auxiliares, en la fábrica o centro de producción, en los procesos de distribución y logística, y en la venta y devoluciones en tienda física o a través del canal online. No obstante, cabe señalar que no todos los expertos son partidarios del ozono como herramienta de desinfección en fábricas y zapaterías. Desde el centro tecnológico del calzado Inescop alertan de que no hay evidencias de que el ozono elimine el coronavirus en el calzado, y, además, aseguran que el ozono puede producir cambios de color o brillo en los materiales, incluso microgrietas tras ciclos de higienización repetitivos.
Por otro lado, el director general de Eurofins Spain, Enrique Rivas, destacó la importancia de monitorizar al virus en los entornos empresariales. En especial, conviene detectar su posible presencia en «puntos calientes» dentro de las empresas como suelos, sillas, impresoras, pomos de puertas, interruptores, teléfonos, etc.
La última parte de la sesión formativa estuvo dirigida por el experto del departamento de Ingeniería Computadores de la Universidad Miguel Hernández de Elche (Alicante), Miguel Onofre Martínez. El profesor abordó el papel de la termografía como mecanismo en la detección de la covid-19. En este sentido, habló del funcionamiento de los distintos sistemas de medición como los pirómetros puntuales y cámaras termográficas. En relación con el uso de estos dispositivos, advirtió que «la distancia influye en la medición» de los resultados obtenidos. Para una medición precisa, según Martínez, se debe dirigir hacia la cuenca ocular del lagrimal puesto que no está influida por el ambiente ni por la termorregulación del cuerpo. Asimismo, recordó que la toma de temperatura a empleados está justificada por la obligación de cumplimiento de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales con la finalidad específica de contener la propagación del coronavirus.
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